viernes, 20 de agosto de 2010

EL RETORNO



Hoy regrese, regreso al vacio, a las noches de insomnio y en el insomnio las sombras, de pronto pienso que solo me fui a buscar excusas para estar lejos, en esta ausencia de amor que al partir me has dejado, en este silencio forzado, en este juego grotesco de respuestas cortas. Regreso cargada de tristeza, de esa tristeza que tengo que dejar detrás de la puerta para evitar nombrarte y al nombrarte llorarte como quisiera.


Mi mundo no es este en el que ahora vivo, lo absurdo es que extraño un pasado que nunca he vivido, ningún instante me ha pertenecido o ha sido mío tan solo lo he tomado prestado al destino.


No pretendo ser ni parecer víctima de nada, es un papel que abandone hace años, solo soy una mujer que ha perdido un ser amado, que tiene miedo de lo incierto, de este mundo dominado por intereses de mercado y de una tecnología que se utiliza para llenar espacios emocionales, huecos del ser humano, redes sociales en las que desojamos las vivencias, lo bueno y lo malo, en las que entregamos nuestra esencia sin importar que sea miel para el hocico de asno.


Este es mi retorno, repleto de incertidumbre, de soledad acompañada, de una actitud de lucha y ganas de no repetir lo mismo, quiero vivir como dueña de mis actos, con el respeto que me he ganado, disfrutar cada presente que Dios me regale con mi libre albedrio entregado a su voluntad por que así lo he decidido.


Luz Elena Sepúlveda

lunes, 16 de agosto de 2010

EL MISTERIO




EL MISTERIO


La vida me sorprende de nuevo en un papel inesperado, veo un rostro confundido y lleno de nostalgia, antepasado rostro enamorado, ilusiones, nueva vida, esperanzas, pasado con problemas en casa, el rostro enamorado no es aceptado, las ilusiones reposan entre campos de fe y esperanza, llega la espera de una muerte anunciada inesperada, no es la novia no, es papá quien deja la materia terrenal y abandona su faz al recuerdo de amor, a la creencia de un mas allá de vida inmortal, llena el alma un dolor natural por la ausencia, se evaporan los rasgos del amor, la mujer de nuevo entre la ignominia, el abandono y su necesidad de ser amada, se piensa en escapar y trabajar, trabajar y el destino, Dios dispone algo diferente, el amor esta dentro de mi corazón. El presente es nublado, estoy a km de lo que pensaba mi realidad, me quedo entre muchos años atrapada, no habrá escuela, no cursos de inicio de ciclo escolar, amanece y digo, aquí estoy Jesús, Dios del universo, hágase tu voluntad.


Continua la vida, con ella mi faz y en mi faz el misterio de lo que vendrá.


Luz Elena Sepúlveda