EL AMOR Y SU REALIDAD (NO EL DE CUALQUIERA)
La realidad es un lugar sombrío, se muestra con hechos aunque te invada de palabras de miel tostada sobre hojuelas de avena, esta impregnada de guiños coquetos, el roce de las manos, decires indirectos pero apasionados que piensas son para ti, noches sin dormir emocionada por que el te ha dicho que al rato te llama y eso aunque la encuentres a ella y te diga “Estoy en su cama”. La realidad te alcanza con los brazos cruzados, un día los vez felices y enamorados haciendo planes de amor, no sabes que pensar, aún te hace creer que es solo una amistad, que ya lo tiene harto, que su verdadero amor esta en otro lado y de pronto zaaaaaaz, que aburrido bla, bla, bla, la red estructurada dentro de ti para creer en una realidad falsa se viene abajo, hasta te emocionas y piensas, “igualito como le paso a “La hija del Mariachi” wooow, ya crees que tu vida amorosa es como una telenovela. Miradas indiscretas, canciones dedicadas especialmente para ti, risas, lagrimas promesas rotas, ilusiones abandonadas, ojos más tristes aun, sigues tu vida en esa cotidianeidad, todo es como un gran escenario en el que no te das cuenta de que cualquier parecido con la realidad es simplemente la realidad.
Luz Elena Sepúlveda
La realidad es un lugar sombrío, se muestra con hechos aunque te invada de palabras de miel tostada sobre hojuelas de avena, esta impregnada de guiños coquetos, el roce de las manos, decires indirectos pero apasionados que piensas son para ti, noches sin dormir emocionada por que el te ha dicho que al rato te llama y eso aunque la encuentres a ella y te diga “Estoy en su cama”. La realidad te alcanza con los brazos cruzados, un día los vez felices y enamorados haciendo planes de amor, no sabes que pensar, aún te hace creer que es solo una amistad, que ya lo tiene harto, que su verdadero amor esta en otro lado y de pronto zaaaaaaz, que aburrido bla, bla, bla, la red estructurada dentro de ti para creer en una realidad falsa se viene abajo, hasta te emocionas y piensas, “igualito como le paso a “La hija del Mariachi” wooow, ya crees que tu vida amorosa es como una telenovela. Miradas indiscretas, canciones dedicadas especialmente para ti, risas, lagrimas promesas rotas, ilusiones abandonadas, ojos más tristes aun, sigues tu vida en esa cotidianeidad, todo es como un gran escenario en el que no te das cuenta de que cualquier parecido con la realidad es simplemente la realidad.
Luz Elena Sepúlveda
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