MAÑANA, MAÑANA

Es tu ausencia la que crece en la distancia, es ese dolor tan tuyo que mi alma hace mío el que desgarra mis entrañas, si pudiera dar un salto y llegar a ti, te convencería con mis besos de que no existe en mi vida hombre más importante que tu, eres mi sol, de noche de día, tomada libremente de tu mano o robándote un beso a escondidas. Quien te ha dicho que solo te quiero, si ya te he reiterado que te amo, te amo como amo la libertad de decirle a Dios buenos días, te amo con la convicción de sortear tempestades en nuestro Barco llamado “Ser”. Esta noche tan menos mía, en la que duele que ya no estes, esta noche sorteada de lagrimas como continuidad de un dia menos facil que ayer, no quiero perecer sin perderme de nuevo en tu sonrisa, sin dibujar mi vida entre tus manos, soy complaciente conmigo misma, tengo esa fe inquebrantable que me hace decir “Mañana, si- mañana seré la que siempre fui, esto significa esperanza, amor, perdón, lealtad, sinceridad y mañana estarás tu de nuevo en mi vida, en ese presente, en cada presente con el que Dios me guía, mañana, mañana será otro día.
Mañana, mañana.

Luz Elena Sepúlveda